domingo, 20 de octubre de 2013
domingo, 6 de octubre de 2013
Momentos Poéticos
Uno nunca imagina que aquellas cosas que hemos leído pasan a ser parte de
la realidad, o sino no eran ya parte de la misma solo que no lo sabíamos, la lectura
ha sido y es una parte fundamental de mi vida, he pasado por todos los tiempos
y formas de la literatura, pero creo que una de las cosas más importante que permanecen
en mí, es aquello que leíamos juntos con mi mama, esa forma era la poesía. La poesía
es aquella forma de expresión en las letras que permite al hombre conectar los
signos, el orden y los estados, es decir que un simple verso y a través del
mismo puedo ver, saber y sentir el estado
del alma del autor. Hace mucho, unos de mis familiares me dijo que la poesía
son pedazos del alma que hombre va dejando por allí, y es una definición muy clara estos estados.
Pero a lo que quiero llegar con este simple relato, es dejarles ver como un
acontecimiento de la vida y los estados son parte de un momento poético. Hace muchos
años una de mis tías (la más querida)
me regalo un libro donde este contenía cuentos varios entre los cuales había muchos
de Borges, imagínense que a los 10 años uno puede entender poco de toda la literatura
borgeana, algo que hoy me apasiona, puedo decir entonces que mi tía con ese
regalo no solamente marco mi vida sino que me condiciono en todo el tipo de
lectura que vendría después con los años, puedo decir que me introdujo en la belleza de la lectura.
En una tarde de vacaciones de verano, sentados los dos bajo el pino que había
en el patio de su casa, tuvimos una conversación que jamás me imagine que
trascendiera en el tiempo, y fue más o menos así.
M-tia,¿vos te vas a morir?.
T-claro, todos morimos.
M-¿y que voy a hacer yo si te morís.?
T-tenes a tus papis y no te preocupes por mí.
M-te voy a extrañar.
T-no, mira cuando me muera y me lleves flores
y junto a mi tumba sientas lo pájaros y uno entre tantos cante mejor que otros,
soy yo diciéndote que estoy bien
M-bueno está bien.
Quedo como un simple dialogo
casi yo diría nada significativo, pero como Dios ha hecho de nuestra mente una
especie de viejo baúl donde se guardan recuerdos que para el si son
significantes más allá de nuestras perspectivas. Fue así que pasado los años y
ya no un niño, sino un niño en estado de hombre, que fui al cementerio a visitar y recordar a
familiares, y es allí donde llego a la tumba de mi tía, su tumba era en cierto
modo un reflejo de lo que fue su sonrisa, llena de flores y cuadros de ella
donde siempre se está riendo y trasmitiendo vida. Me paro allí, me inclino,
acaricio las flores y el aroma de las mismas me introducen en una mundo de recuerdos
de mi infancia donde ella fue un enorme protagonista de mi niñez, entonces me invade la tristeza, inclino mi
cabeza, cierro los ojos y dije hacia mis adentros cuanto la quería…me quede en silencio
y nuevamente el aroma de las flores y ahora el canto de los pájaros, como si
ese momento miles de ellos cantaran para ese momento, pero justo allí cuando respiro
profundamente, uno de ellos sobre sale con una melodía hermosa, y frente a este
canto del pájaro lo demás callaron…aquella vieja conversación salió del baúl de
los recuerdos vaya a saber por qué pero recordé sus dicho… “mira cuando me muera y me lleves flores y
junto a mi tumba sientas lo pájaros y uno entre tantos cante mejor que otros,
soy yo diciéndote que estoy bien”
Así que me puse de pie mire su
tumba bese su retrato, toque su flores y me retire de allí en paz, había vivido
allí un estado poético vello y único como ella me enseño a ver las cosas de
esta vida. Todo lo que hay en la tumba de mi tía es algo que ella pidió que estuviera,
lo cual habla mucho de ella, ¡qué manera de morir, pero que manera de
permanecer en la muerte¡
Así es como muchas veces Dios actúa
con sus palabras en nuestra vida, él de manera que yo no entiendo me mantiene
en un letargo de ignorancia en cuanto a un asunto determinado de mi vida, sin embargo
en un determinado instante de la vida sus palabra cobran sentido de manera poética,
sublime y maravillosa debido a que ahora la palabra da paz tras la comprensión.
Así que demás está decir que sigo recordando a mi tía con mucho amor, pero más aún
quiero tener una relación con el padre pero de amor donde el confirma su
palabra en mi hasta el último día de mi vida.
“Porque
este Dios es Dios nuestro eternamente y para siempre;
El
nos guiará aún más allá de la muerte.”
Salmos 48:14
Mario Griguelo
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